La retirada de España, Países Bajos, Irlanda y Eslovenia de Eurovisión está marcando un punto de inflexión en la historia del certamen y abriendo el debate en otros países sobre la participación de Israel. En Reino Unido, se ha iniciado una campaña de firmas para solicitar que la cadena BBC se sume se retire también del concurso musical: «Boicot a Eurovisión, a menos que Israel sea expulsado», reza el enunciado.
Esta campaña se ha realizado a través de la plataforma de peticiones online 38 Degrees y cuenta ya con el respaldo de más de 67.000 firmas, habiendo marcado un objetivo de 100.000. «Una investigación de la ONU confirmó lo que todos sabemos desde hace tiempo: que Israel ha cometido genocidio contra los palestinos en Gaza», explica el texto que acompaña a la petición. «Más de 60.000 personas han sido asesinadas. La mayor parte de la población ha sido desplazada repetidamente y obligada a abandonar sus hogares. Se ha declarado una hambruna en la ciudad de Gaza», prosigue.
Señalan también que BBC, como miembro del Big 5, tiene un «enorme poder para influir en Eurovisión» y recuerdan que a Rusia se le prohibió participar en Eurovisión tras la invasión a Ucrania. «No es justo que un país cuyo gobierno y ejército cometen estas atrocidades siga teniendo permitido competir en un evento que existe para celebrar la unidad y la inclusión», añade la petición.
La postura oficial de BBC ha sido la de respaldar la decisión de permitir que Israel participe en el Festival de la Canción de Eurovisión: «Apoyamos la decisión colectiva de los miembros de la UER. Se trata de hacer cumplir las normas de la UER y ser inclusivos», ha dicho uno portavoz de la televisión pública británica.
Además de la petición ciudadana, otras voces en Reino Unido han manifestado su descontento con que el país mantenga su participación en Eurovisión. El partido de los Verdes Escoceses emitió ayer un comunicado de prensa en el que instan a BBC a seguir los pasos de España, Países Bajos, Irlanda y Eslovenia, calificando de «vergonzosa» la decisión de permitir a Israel que siga en el concurso.
«En su día un símbolo de unidad y esperanza en toda Europa, han convertido el Festival de la Canción de Eurovisión en una fachada de lavado de imagen para los criminales de guerra en Israel», ha dicho su portavoz Patrick Harvie. «No puede haber lugar para quienes facilitan el genocidio en el escenario de Eurovisión, que se supone debe celebrar el amor y la diversidad. Las atrocidades infligidas contra los palestinos en Gaza se encuentran entre los peores crímenes de este siglo y no pueden ignorarse ni descartarse en nombre del entretenimiento».





